Luego de conocidas las ternas, fue notoria la designación de José de los Santos para arbitrar la Divisional “B”, y no la “A” como se esperaba; otros nombres faltaron en las designaciones y de ahí salió a la luz una “perlita” que dejó la 1.ª fecha del Salteño.
Habría sido suspendida la terna que dirigió el clásico entre San Eugenio y Santa Rosa en el Dickinson, la cual estaba integrada por Enrique Kurowski como árbitro central del encuentro, asistido por Mauricio Revuelta y Víctor Rodríguez.
El motivo de la suspensión habría sido por haber comenzado el encuentro sin personal de seguridad dentro de la cancha. Si bien había personal de policía en la puerta del estadio, dentro de la cancha no estaba el personal de la empresa privada que debería de estar, y por eso la suspensión.
Ahora la pregunta es: ¿por qué no estaba la seguridad?
Según pudo saber Tiempo de Noticias, la falta de seguridad se debió aparentemente a un olvido o falta de comunicación con el personal seguridad que no estaba avisado que debía concurrir también al Dickinson, y por esto la misma habría llegado recién al comienzo del segundo tiempo.
A todo esto los árbitros conocen las reglas, y no se puede comenzar un partido sin la seguridad presente. Quizás la buena voluntad les jugó una mala pasada y por esto estarían suspendidos una fecha.
¿La terna es responsable de este olvido? ¿Desconocían que el partido no puede comenzar por medidas de seguridad para ellos mismos? ¿Falta comunicación? ¿Es aceptable olvidarse justamente del Dickinson? y más en la primera fecha donde además se jugaba el clásico del barrio.