Por Nicolás Rodríguez.
Fiel a su estilo y dejando a un segundo plano sus responsabilidades como jefe comunal, el Intendente Andrés Lima repartió folletos este fin de semana en el interior del departamento.
Mientras varias zonas de la ciudad e interior están bajo agua, el Intendente hace lo que mejor le pase con plata de todos los salteños, repartir folletos.
Folletos pagos por los salteños y en vehículos oficiales. Son sólo eso, folletos porque soluciones a los problemas que tiene la gente no llegan.
Varias zonas de la ciudad tienen graves problemas por falta de obras, mientras el Intendente gasta el dinero del pueblo en viáticos, folletos , publicidad y salarios para amigos.
Un intendente debe estar en primer lugar para liderar acciones ante una emergencia y no pasear para repartir folletos.
Por suerte a esta mala gestión le queda poco tiempo, ya que se aproximan las elecciones. Un modelo agotado y pésimo para el departamento