Comparte esta noticia

Tal como adelantó en exclusiva Tiempo de Noticias, las autoridades de la Intendencia de Salto presentaron ante la Justicia una denuncia contra varias familias de Termas del Arapey con el objetivo de concretar el desalojo de las mismas. Se trata de personas que hace más de 40 años que viven en la zona, su fuente laboral son “changas” en hoteles y comercios del parque termal. Al tiempo que las viviendas son de condición humilde.

Pese al reclamo de los vecinos, quienes aseguran que no tienen dónde ir en caso de ser desalojados, la Intendencia ratificó en las últimas horas la denuncia contra estas familias.

Según informa el portal de Radio Tabaré, la directora de Turismo de la Intendencia de Salto, María Noel Rodríguez fue consultada sobre los posibles desalojos de familias que habitan viviendas municipales en Termas de Arapey de forma irregular. Al respecto dijo que la comuna cuenta con 55 viviendas que son usufructuadas por funcionarios que trabajan en el centro termal. El pasado año, el director de Turismo en aquel entonces, Gustavo Chiriff, solicitó la realización de un informe socioeconómico de todos los habitantes de las viviendas para conocer en qué situación se encontraba cada uno. El pedido surgió a raíz de la preocupación de que funcionarios que ocuparon viviendas de un dormitorio cuando ingresaron a trabajar y que, sus familias comenzaron a crecer pero no se les otorgó otra con mayores comodidades.

A raíz del informe, se detectó que diez de las 55 viviendas estaban siendo ocupadas por personas que ya no trabajan para la Intendencia de Salto por motivos de jubilación, cese y otras personas que quedaron como agregadas en esas casas.

Según declaró la directora de la cartera, todas las familias que se encuentran en esta situación tienen propiedades en Salto, Belén o Constitución y no quedarían desamparadas en caso de ser desalojados por resolución de la Justicia. La urgencia pasa porque hay llamados para mucamas y obreros pero la Intendencia no tiene donde alojar a esas personas. Los guardavidas zafrales que son contratados en verano, debieron ser alojados en bungalows que, normalmente son destinados a los turistas porque no hay lugar.

En todos los casos los habitantes de las diez viviendas declararon tener otras viviendas que habitar si los desalojan y es el Juzgado de Pueblo Belén que tiene la causa en su poder.

 

 

 


Comparte esta noticia
Acción no permitida! HostingServicios.com