…es cambiando la política. Si el gobierno destituye al actual Ministro del Interior y nombra a otra persona pero la política es la misma la situación no cambia.
Las redes que están reclamando un día de paro nacional por el asesinato del Sr. Heriberto Prati lo que tienen que pedir es que se cambie la política, no que se cambie el Ministro.
Son muchos los homicidios y otro tipo de delitos que han ocurrido recientemente en distintos barrios. Cuando hace poco asesinaron a una señora que estaba sentada en la puerta de su comercio, una actitud similar a la desgracia que vivió el Sr. Prati, en ese caso como en el actual, como en otros pasados y otros que lamentablemente sucederán, lo que hay que cambiar es la política del gobierno. Con este Ministro ó con cualquier otro, pero con la misma política, las cosas no van a cambiar.
Este tipo de situación que perturba enormemente la vida de cualquier sociedad no se resuelve simplemente con mano dura, requiere políticas que comprendan además una actitud policial diferente, otra conducta judicial y que el gobierno emita un mensaje que sea recogido por la gente que delinque como una determinación decidida a cortar esas libertades con las que han gozado desde que el Sr. Díaz, Ministro del Presidente Vázquez, dijera que la culpa la tiene la sociedad y procediera a poner en libertad una cantidad de personas que estaban detenidas en el momento en que la economía crecía por el fantástico aumento de precio de las materias primas. Creció la economía y creció el delito. Alcanza con recordar la visita de la Ministra Arismendi y de un Diputado a la Colonia Berro, y sus expresiones a propósito del dicho “mis muchachos”. Todos creemos que hay que tratar de recuperar a los que han caído en el delito, pero eso supone un cambio de política educativa, un cambio de política económica, para que el país tenga suficiente oferta de empleo a la gente más joven, en una palabra, requiere un cambio de ideología y eso es lo que el Dr. Vázquez no puede hacer.
Una economía tan ideologizada de base marxista no solamente empobrece, no solamente quita perspectiva a la sociedad, sino que además, destruye los valores morales. Algún día se darán cuenta de esto. Pero ese día es el día de la ELECCIÓN NACIONAL del 2019.
Jorge Batlle.
Columna publicada en su cuenta de Facebook.