Por Cecilia Eguiluz.
Nuevo año y nuevos precios para contribuciones y patente y en este último caso no hubo defensa a los contribuyentes por parte del Intendente de Salto, quién por el contrario votó ese aumento en el marco del Congreso de Intendentes. Una vez más el concepto entreguista que tiene este gobierno departamental, se doblega ante otros y no defiende a los salteños, pero lamentablemente ya estamos acostumbrados a que actúen de esa manera.
Lo interesante es que uno puede aceptar un aumento de los tributos cuando mejoran los servicios, cuando se invierte en obras, cuando se ve el trabajo y cuando en vez de excederse en gastos, los excesos son en inversión.
Y justamente sobre esto quiero hoy reflexionar con uds., los excesos que realiza el intendente Lima y sus cargos de confianza.
Excesos en los viáticos más de un millón y medio de pesos pagados por los salteños en un año y medio para los viajes de éstas personas, las preguntas son varias ¿es necesario que el intendente se lleve 500 mil pesos por encima de su sueldo en viáticos? ¿a donde viajaron? ¿que consiguieron para Salto? ¿éste era el gobierno austero?.
Excesos en los ingresos de amigos y familiares a la intendencia, 300 personas han ingresado ya a la intendencia, según fuentes del propio FA. Comenzaron la gestión echando a 250 funcionarios de grados bajos, pero ingresaron a 300 amigos en grados altos y el argumento de la “Intendencia fundida” que tanto les rindió en la campaña, se les cayó del todo; quedó al descubierto la mentira, pero el daño que hicieron es irreparable.
Excesos en adjudicar licitaciones por UN millón de dólares por encima de los precios más baratos, sobre ésto tendrá que contestar en la Justicia Penal, el intendente y todos los que intervinieron. Exceso en endeudar en octubre de 2016 a la intendencia en 100 millones de pesos en el Brou, sin informar a nadie…¿en que se gastó el dinero?. A estos excesos y falta de transparencia debemos sumar los 70 millones de pesos de los inundados que nadie sabe a dónde fueron a parar.
Excesos en la utilización de vehículos públicos, resulta que ahora los autos de la intendencia son usados para ir al fútbol, para hacer política, para ir a tomar la copa, para salir a comer los miembros de su grupo. Pero además de ese abuso de los bienes públicos, se gastan miles de pesos de los salteños en el alquiler de vehículos, tampoco sabemos ¿para qué?. Por si esto fuera poco sacaron de las líneas urbanas de pasajeros un ómnibus de todos los salteños y se lo entregan a sus amigos para sus negocios y aparentemente de manera irregular, según fue denunciado ya.
Este gobierno del FA cerró el Hogar para Mujeres víctimas de violencia doméstica y transformó ese espacio en un comité de base, donde entras por politica y te sacan por la fuerza.
Los excesos millonarios en publicidad, no son para promocionar Salto, para que vengan turistas o inversores, por el contrario son para promocionar al intendente que no puede superar su complejo de que no es el hombre más votado de Salto y que solo lo eligieron dos salteños de cada diez. La vanidad del intendente transformó a las páginas oficiales de la Intendencia en espacios de promoción de su figura, con un estilo Chavista de sobreexposición, quizá eso ayude a su ego, pero le quita a Salto la posibilidad de superarse y a él mismo la posibilidad de empezar a gobernar algún día.
En estos días el intendente de Salto y sus directores, a quienes les pagamos más de 100 mil pesos por mes, andan en los vehículos municipales entregando folletitos en las localidades del interior. Por supuesto que a esos folletos con sus fotos a color los estamos pagando nosotros con nuestros impuestos.
Por eso la intendencia necesita recaudar más, así que “apronta tu bolsillo” porque entre todos tenemos que pagar éstos y otros excesos.