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La ministra de Desarrollo Social, Marina Arismendi, compareció hoy miércoles ante la Comisión de Derechos Humanos de la Cámara de Representantes por el  tratamiento y el traslado de pacientes con discapacidad de Aldeas de la Bondad.

El traslado de un grupo de pacientes que se encontraban en una situación de salud muy delicada se llevó a cabo desde Salto a Montevideo en los primeros días de diciembre.

Pocos días después, tres de ellos fallecieron por circunstancias que aún no se encuentran del todo claras. Para las autoridades fueron paros cardiorespiratorios, pero para los funcionarios de Aldea de la Bondad, los motivos del fallecimiento fueron el desarraigo de los pacientes, pues muchos de ellos se encontraban viviendo en la chacra de Salto desde hacía más de 20 años.

Arismendi dijo a la prensa esta mañana que «se cumplieron con todos los pasos para los traslados» y que es necesario continuar con los mismos.

La jerarca sostuvo que junto a su equipo de gestión están revisando todos los documentos respecto al tratamiento de pacientes en Aldeas de la Bondad.

«Tanto ASSE como el Ministerio de Salud Pública hicieron exhaustivas explicaciones en pedidos de informe. Se está trabajando con quienes se presentaron y ganaron las licitaciones para hacer los traslados y en eso está trabajando el INAU y será de acuerdo a las convocatorias a organizaciones que fueron ganando esas licitaciones», puntualizó.

Y agregó: “Si hay algo que me duele y molesta, es no haber realizado los traslados antes”.

Para Arismendi, según informa la web de Presidencia, el traslado es una determinación muy dura y radical que expone problemas de la sociedad que es necesario resolver. Destacó que es necesario asegurarles los derechos y la calidad de vida a estas personas.

“Decidimos tomar medidas, con toda la tragedia que eso implicó, especialmente porque somos sensibles y porque creemos que son personas con derechos”, señaló.

El Instituto del Niño y Adolescente del Uruguay (Inau) en coordinación con otros organismos del Estado siguen trabajando para continuar con los traslados porque es absolutamente necesario, aseguró Arismendi.

Y explicó que se parte de la base de que la Fundación Imcos y la asociación Aldeas de la Bondad rescindieron el convenio que habían mantenido desde el año 1986 con el INAU.”La fundación rescindió el contrato por lo tanto había que sacar a las personas de ese lugar, tomando todas las medidas necesarias”, dijo.

«Se cumplieron con todos los pasos para los traslados», aseveró la jerarca.

Y en referencia al estado de salud de los pacientes que llegaron desde Salto, sostuvo que son monitoreados en forma permanente con las entidades de salud correspondientes.

Y agregó que «ayer tuvimos la emoción de ver algunas de las fotos de los jóvenes que pasaron de la total inmovilidad a estar dibujando, con un tema de estimulación que es parte de lo que se necesita».

El PAIS


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