Pensando un poco por qué es tan importante tener una bandera?, por qué es necesario el uso de la bandera como símbolo?, y por qué tener una propia?, no? Podríamos conformarnos con la bandera uruguaya que nos representa a todos.
Y las banderas desde su inicio fueron los estandartes, un elemento identitario; y el primer estandarte documentado históricamente existió en el Imperio Persa. Cuenta la leyenda que un herrador se rebeló contra el tirano que gobernaba y lo derrotó y traspasó su delantal de cuero con una lanza de madera y el príncipe de la casa real que quedó gobernando lo adornó y formó un estandarte que llamaron “Derafsh Kaviani” que significa “el estandarte de los reyes”.
Lógicamente con el objetivo de convertir esos estandartes en algo más práctico se fueron modificando gradualmente hasta lo que hoy llamamos banderas.
Y cuándo nos sentimos representados por una bandera entonces? Es porque la bandera no representa la tierra, un territorio determinado, que lógicamente tiene sus límites, representa su gente, un grupo de personas.
Sino fuera así no podríamos explicar el orgullo que se siente cuando se lleva la bandera que nos representa a otros lugares del mundo y se la muestra con orgullo.
Y la bandera de Salto es ese referente común que nos une, es un emblema poderoso, es como que adquirimos más identidad como salteños a partir de tenerla. Cuando tenía 19 años y estudiaba en el IFD recuerdo claramente que se nos informó y mostró cuál sería la bandera de Salto a partir de ahí y la empazamos a ver junto a los símbolos patrios, y la empezamos a ver en distintas instituciones y en logos y en los medios de comunicación.
Y hoy, a 20 años, no nos imaginamos un Salto sin esa bandera, el sentido de pertenencia que hemos adquirido es indiscutible y hemos visto detenidamente banderas de otros departamentos y sin dudas la de Salto es la más linda! Y linda en un sentido global, no sólo estético.
Se ha planteado durante mucho tiempo que las banderas cumplen un gran papel en las sociedades; el de incluir o el de dividir; lo vemos en las dualidades, las banderas de Argentina y Uruguay, la de Peñarol y Nacional, la de Salto y la de Paysandú, las banderas de los partidos políticos; sin embargo en algún momento y dependiendo de las circunstancias están juntas, se unen y quedan mancomunadas según la causa.
Me resultó muy interesante una entrevista que le realizaron al coronel Carlos Alfredo Etchevers Vianna sobre su participación en el concurso de búsqueda de la Bandera de Salto, se plantean allí varios comentarios muy interesantes , voy a traer sólo algunos de ellos: que cuando le mencionaron sobre el concurso enseguida dijo que quería participar, no lo dudó y que para ello estudió “vexilología”, la ciencia que hace a las banderas, que participaron 384 trabajos y que su bandera fue aprobada por unanimidad por esta Junta Departamental, el presidente era nuestro amigo Alcides Finozzi.
Y por más modesto que pueda ser su autor, y aunque las bases del concurso establecían que el propietario del trabajo debía renunciar a cualquier tipo de derecho sobre la bandera, no deja de ser su creador, y no imagino el orgullo que se debe sentir cada vez que flamea la bandera de Salto en los actos, en las instituciones, en las manos de los representantes en todo el mundo.
Y qué orgullo para la familia! Y sabemos de Etchevers como acérrimo defensor de la familia:
…“ hoy el Uruguay está pidiendo por favor a todos que construyamos un país mejor, con mejor educación. Pero fundamentalmente que construyamos familia”….
Y me quedo con esa frase que hace reflexionar, y qué lindo que el creador de la bandera de Salto tenga esos valores tan importantes y que se necesitan tanto.
SALUD SALTO!
EDIL MTRA. MARÍA DE LOS Ángeles Márquez Rossi.