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Numerosos padres de escolares y liceales con los que dialogó LA PRENSA manifestaron su decisión de llevar a cabo un relevamiento de firmas a los efectos de adelantarse a lo que seguramente puede constituirse en la reiteración de un problema que ya se concretó en dos oportunidades en pocos días.

Se trata de llegar a las autoridades de la Intendencia de Salto para que el próximo lunes, oportunidad en que la selección uruguaya jugará su tercer partido en el marco del Mundial de Rusia, no se suspenda totalmente el servicio de ómnibus.

Como es de público conocimiento en las dos oportunidades anteriores, el servicio municipal de transporte urbano de pasajeros no se prestó durante las dos horas que insumió el desarrollo de los partidos.

Demasiadas inasistencias

La situación anteriormente mencionada determinó que la mayor parte de niños y jóvenes que utilizan ese servicio para llegar a sus centros de estudios debieran faltar, o se encontraran con serias dificultades para retornar a sus hogares en aquellos casos en que la distancia es importante.

Quienes tienen la intención de marras hacen saber que ya son demasiadas las faltas que se van acumulando porque a lo mencionado deben sumarse los paros habidos y por haber, más lo que ya implica de por sí naturalmente la llegada de las tradicionales vacaciones de invierno.

Además hay que tener en cuenta lo que han sido las faltas obligadas en muchos casos en oportunidad de producirse las anteriores tormentas e intensas lluvias, sin dejar de lado aquellos casos generados por quebranto de salud.

Servicio restringido

Según quienes transmitieron la intención, en su mayoría de la zona sur de la ciudad, se pretendería sensibilizar a las autoridades para que de surgir nuevamente la iniciativa de los trabajadores del sector de no trabajar durante el desarrollo del partido entre Uruguay y Rusia, se busque la forma de implementar un servicio que aunque restringido, permita a los chiquilines concurrir a clase o al salir, poder trasladarse a sus casas.

Hay que tener en cuenta que estando fijado el partido para la hora 11, surge claramente que el servicio de ómnibus se vería paralizado hasta la hora 13, tiempo durante el cual se requerirá a las autoridades que durante ese tiempo se pague en forma extraordinaria a quienes deseen trabajar.

Un año muy irregular

Por lo demás, hay que tener en cuenta que para el próximo 28 de junio está previsto un nuevo paro, lo que coincidiría con el día jueves, previo al comienzo de las vacaciones de invierno, por lo que tras concurrir el viernes siguiente, sobrevendría el fin de semana y a continuación el inicio del espacio vacacional.

Lo concreto es que la preocupación surge plena, porque además no aparecen soluciones concretas para establecer la forma de recuperar las jornadas perdidas por paros y entonces lo que se ve severamente perjudicada es la formación de los niños y jóvenes que van a tener un año muy irregular en cuanto al dictado de clases, sin mencionar lo que pueda estar pasando luego del transcurso de las vacaciones.

Seguramente sobre la iniciativa de padres se tendrán novedades en las próximas horas.

Fuente: diario LA PRENSA


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