Por Carlos Silva.
El pasado 1º de marzo el presidente Vázquez cumplió 4 años al frente del gobierno, por segunda vez, y cuando pudimos ver su resumen de este año parece que le hablaba solo a quienes lo votaron y no a todo el pueblo. Además vimos a un presidente que sigue viviendo en un mundo paralelo y no quiere ver la realidad del Uruguay, pareciera que estamos en el país de las maravillas.
Primero y antes que nada nos preocupa mucho que éste sea un gobierno sin autocrítica y nos quiera hacer creer que todo está bien, nos preocupa porque eso demuestra que el año que le queda por delante, quizás poco para él, pero mucho para los uruguayos, nada va a cambiar. Realmente es insólito escuchar a un presidente que no mire para delante y parece que está mirando la hora para que su turno al frente del gobierno termine.
Lo escuchamos hablar sobre la política de seguridad pública del Estado, parece que está todo encaminado y no se precisa cambio alguno. No reconoce que en éstos últimos años, la delincuencia ha ganado terreno y que tenemos los peores números de la historia del país. Según cifras extraoficiales, en el 2018 se cometieron más de 400 asesinatos, sí, más de 400 en Uruguay, impensado para nuestro país, pero para Vázquez está todo bien y su ministro Bonomi sigue en su cargo. Los problemas económicos del Uruguay no son tantos y según el Presidente “es normal que las empresas cierren”. Para nosotros es lamentable que alguien que está al frente de nuestro país piense de esta manera, la gente está desesperada porque no hay trabajo y para el presidente es normal, realmente es de locos esta situación.
La educación no ha avanzado en nada y cuando nos ranqueamos con otros países de la región, nuestros resultados en materia educativa son desastrosos. El Uruguay ha gastado más que nunca en esta materia, pero los resultados cada vez son peores. Vemos como día a día son más los jóvenes que son excluidos del sistema educativo formal y nada se hace para cambiar esto, pese a que hay ejemplos, en el propio país, que se pueden lograr resultados mejores pero debemos hacer cosas distintas para lograrlo.
Así podríamos seguir analizando el discurso del Presidente del pasado 1 de marzo y seguiríamos teniendo enormes diferencias con la visión que nos quiere vender a los uruguayos. Podremos discutir varios aspectos y seguramente no nos podremos de acuerdo con quienes hoy gobiernan y no porque no estemos dispuestos a hacerlo, sino porque desde el otro lado están con una venda en los ojos y no quieren reconocer la realidad en que vivimos.
Lamentablemente creemos que a este gobierno se le terminó el tiempo, se quedó sin ideas, o quizás, nunca las tuvo, se quedó sin ganas o sin fuerzas para seguir luchando por mejorar esta situación, y también, los cómodos sillones del poder, no lo dejan ver la realidad. Para cambiar este país no queda otra que cambiar de gobierno, porque como decía Einstein “Locura es hacer lo mismo una y otra vez esperando obtener resultados diferentes”.
Lista 50 del Partido Nacional