Pese a la promesa de reparar las calles en 100 días, el gobierno de Andrés Lima empeoró el estado de las calles de Salto debido al poco trabajo que se viene realizando al respecto.
El 90 % de las calles y avenidas de la ciudad están completamente destruidas, con parches que duran poco y repletas de pozos. Lima está llegando al final de su período y en casi cinco años dejaron a la ciudad peor de lo que estaba. Basta con salir a recorrer para darse cuenta el estado de abandono en el que se encuentra Salto. Las quejas no son solo de turistas, sino los propios salteños que estamos cansados de excusas y falta de trabajo.
Calles y avenidas completamente destruidas, algunas emparchadas con materiales de mala calidad. La mala administración de las autoridades de la Intendencia queda a la vista con un fácil cálculo a razonar, ingresaron a mas funcionarios, hay más maquinaria (comprada en base a endeudar al departamento) y la ciudad cada vez está peor.
Para colmo, la mayoría de los servicios están privatizados y con mas personal en la comuna las cosas cada día están peor.
Salto es el departamento con menor avance de obras, esto implica que se pierden millones de pesos por falta de trabajo. El actual gobierno se dedicó a pelear con la anterior administración y dejó caer al departamento.
Lima representa un modelo nefasto de gestión, falta de trabajo y amor por su departamento.