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Por Juan José de los Santos.

Por estos días nuevamente las regiones fronterizas de nuestro país vuelven a atravesar por los avatares de siempre, los de toda la vida. Los vaivenes económicos y políticos de nuestros países vecinos, repercuten directamente en el nuestro, y los que vivimos en algún punto fronterizo, aún más. Si bien las razones son distintas, las consecuencias son las mismas. Analicemos:
– En la Argentina se produjo una disparada del dólar y la consiguiente devaluación de la moneda, esto trajo aparejado la baja en el tipo de cambio con respecto a nuestra moneda, quedando así los precios de la gran mayoría de artículos y mercaderías con un precio muy por debajo de los nuestros. La nafta por ejemplo está costando $ 31 el litro. Pero también los productos alimenticios, limpieza, aseo personal, ropa, calzado, etc. Prácticamente todo esta por debajo de los precios que pagamos en nuestro país.
– Por el lado de Brasil, la situación es otra, el problema ahora se llama Loja França. Son comercios establecidos bajo un régimen muy parecido al de las Zonas Francas de nuestro país, pero del lado brasilero. Ya se han establecido 2 comercios de este tipo. Uno en la Barra do Quarai (frente a Bella Unión) y otro en Yaguaron.

Próximamente se instalarán 4 más en Uruguayana. Estos comercios venden sus productos sin impuestos. Si a esto le agregamos que los precios del lado brasilero están un 35% (promedio) por debajo de los nuestros, encontramos que estas Lojas Francas tienen sus productos en mas de un 50% más baratos que los nuestros. Para las localidades cercanas y sobre todo para Bella Unión, van a tener un impacto enorme en los comercios locales. Si bien en un principio estos comercios no están vendiendo comestibles, en los demás rubros no se puede competir con sus precios.
Esta situación rápidamente afecta al comercio local, y por ende al trabajo. El éxodo hacia las ciudades limítrofes por parte de la población es rápido. Buscan todo tipo de artículos, incluyendo los de la canasta básica. Es imposible para los comerciantes competir con esos precios, y sobre todo los pequeños comercios. Necesitan una ayuda urgente para poder subsistir, de lo contrario seguirán cerrando sus puertas, y sus trabajadores pasarán a engrosar el ejercito de desocupados que se agranda día a día. Esta ayuda debe provenir del Estado. Para eso son las políticas de frontera. Es urgente su discusión y su aprobación. No se puede seguir esperando más. Las consecuencias serán catastróficas.
Vemos como algo muy positivo, por ejemplo, el decreto 398/007 que permite la rebaja del IMESI a la nafta, para compras con tarjeta, aunque solo esto no es suficiente.
Ahí tenemos un camino para explotar. Se podría aplicar algo parecido a los productos de la canasta básica por lo menos, y sacarle el IVA, para de esta forma poder equiparar un poco los precios con la Argentina (hoy por hoy un 30% menos de promedio).
Se podría implementar también con el uso de las tarjetas. De esta forma la gente compraría dentro del país, y los comercios no cerrarían sus puertas y se mantiene la fuente de trabajo de miles de uruguayos.
Esto le costaría muy poco al gobierno. Y seguiría recaudando por otros conceptos.
Ahora bien, lo ideal seria elaborar una ley definitiva, de rápida acción, y no un parche como hasta ahora.
En estos tiempos electorales, cualquier candidato a diputado que se precie de tal, debería tomar este tema como prioritario en su plataforma. En mi humilde opinión, debería estar a la cabeza de las propuestas, y proponer alguna de estas medidas como de urgente consideración para el próximo gobierno. En esto nos va la vida a demasiada gente en nuestra ciudad como para no tenerlo en cuenta.
Ojalá que así sea, por el bien de todos los salteños.

Edil Juan José de los Santos
Lista 6060
Partido Colorado

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