Manuel Monzeglio, autor de un doblete, lideró la justificada victoria de los tricolores en tierras sanduceras ante un rival poco expresivo.
Nacional volvió al triunfo en la décima fecha del Apertura al vencer por 2-0 a un inexpresivo Cerro Largo en Paysandú, con una noche donde Manuel Monzeglio brilló y anotó por dos.
El partido comenzó con Cerro Largo apostando a una línea de cinco, con Lima como eje del fútbol y un disparo de Max que encontró los guantes del golero.
La visita por su parte trató de encontrar a Ocampo como primera opción, pero con la busqueda de abrir la cancha y tener en la mira a Gigliotti en el área.
Lo cierto es que esos primeros quince minutos eran parejos, con buenos intentos de combinar pero sin llegar a las áreas y un trámite no tan intenso como se podía esperar.
Remates lejanos de Santiago García, Manuel Monzeglio y Yonathan Rodríguez rompieron la modorra de un accionar que lentamente vio como los tricolores comenzaban a dominar en zona de volantes.
Y el gol que le dio la ventaja parcial a los de Repetto llegó a los 34′, tras una buena apilada por derecha, un centro al área que un defensa local quiso sacar, rebotó en Santiago Martínez y quedó servida para Manuel Monzeglio que infló las redes.
Un festejo que premió en algo las ganas de buscar el arco rival, aunque con pocas ideas y muchas individualidades, como luego trató de hacer Castro cuyo remate se fue alto.
Nada cambió el final de esa primera etapa que se fue con victoria de los tricolores por 1-0, con el objetivo de buscar más goles para no pasar ningún sacudón.
Lo cerró
El complemento comenzó con la misma tónica de los anterior, el bolso con la iniciativa, Ocampo incisivo por derecha y un melense tratando de cerrar espacios sin ofender en demasía.
El segundo tanto no demoró y se concretó a los 49′, tras una contra liderada por Alex Castro que asistió a Monzeglio y el volante sacó preciso remate que dejó parado a Lucero Álvarez y amplió distancias (2-0).
Los de Repetto y compañia controlaban el trámite a placer, sin sufrir en defensa y dando la sensación que en breve podían aumentar, como lo intentó una vez más el colombiano sin acertar.
Con el correr de los minutos los dos cambiaron piezas para refrescar los equipos, aunque todo parecía encarrilado hacia un final inexorable. Un par de remate del propio Monzeglio, el mejor por lejos de la cancha y otro de Lozano, avisaron la cercanía del tercero el cual la visita buscaba sin cesar.
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