Los sobrecostos de la obra del Ferrocarril Central, comprometido por el estado por contratos, impidió que en este período se completara la renovación de las vías férreas en el Litoral hasta el puente internacional en Salto Grande, como se proyectó originalmente. La obra fue financiada por el Fondo de Convergencia Estructural del Mercosur, Focem, que aportó 118 millones de dólares.
“Increíblemente se proyectó mal y no se pudo terminar. Tenía que llegar de Salto hasta Chamberlain, hasta la línea central que une a Montevideo”, señaló el director de AFE Gustavo Osta. “Es una vía que no tiene comienzo y no tiene fin”, agregó, al tiempo de calificar la situación como “otro ejemplo de derroche, otro ejemplo de mala administración y en el mejor de los casos de incapacidad”.
Se estima que hace falta una inversión adicional de unos 70 millones de dólares para completar el tendido proyectado. La obra deberá realizarse hasta Salto Grande y a cargo del Estado uruguayo. En este período de gobierno se analizaron diferentes posibilidades de financiación, así como también se buscaron alternativas, entre ellas hacer llegar el nuevo tendido al Puerto de Paysandú.
El Telégrafo