Anoche, organizado por el querido Comité de Base Hospital del Frente Amplio, se realizó la charla-conferencia Salto Grande Frontera, Desarrollo y Energía de la que tuve el honor de ser parte de la Mesa junto a Ing. Gabriel Rodríguez y Andrés de la Iglesia, Presidente y secretario de la Delegación Uruguaya durante los Gobiernos del Frente Amplio. Fue muy oportuno intercambiar con los presentes sobre la realidad de los organismos binacionales y sus perspectivas con un nuevo gobierno del Frente Amplio.
Es de destacar la importancia que tiene para la calidad de la democracia que los Comité de Base, el primer espacio de convivencia que tenemos los frenteamplistas organice este tipo de actividades que pongan el foco en algunas de las problemáticas que tendrá que enfrentar el próximo gobierno.
Concepto de frontera
Superando su condición de límite de la jurisdicción y soberanía de los Estados, tradicionalmente la frontera fue vista como un lugar lejano y oscuro, donde sus habitantes poco importaban, y eso fue estructurando los territorios, hecho muy visible en Sudamérica, donde la mayoría de las ciudades importantes (política y económicamente) se ubican sobre las costas marítimas. Caricaturizando, un frente rico y luminoso hacia el mundo y un fondo sombrío y pobre hacia los vecinos.
Ese concepto de frontera como mero límite geográfico fue cambiando junto con el concepto de territorio y la frontera se transforma en un espacio compartido o común, en un espacio interestatal en el que se hace una particular síntesis de las relaciones entre las poblaciones locales -urbanas y rurales- y el accionar de los diferentes niveles del Estado. Se expresa en un complejo entramado de acciones, dependencias, demandas, confluencias y conflictos que tiene una expresión territorial concreta y ha ido superando conceptualmente la línea fronteriza del área o franja de frontera.
Nuestras Bases Programáticas establecen que “Un país integrado requiere la consideración de la riqueza de la diversidad territorial y las especificidades de cada territorio como escenario del desarrollo”, esto nos desafía a pensar y proponer políticas específicas para nuestra región litoral norte.
Los Organismos Internacionales – Binacionales
Existe un cuerpo normativo acordado con Argentina que se debe respetar, pero los organismos tienen cierto grado de autonomía para regular su funcionamiento interno.
A los Delegados ante los organismos internacionales los designa el Presidente junto al Canciller, que son los responsables políticos en Uruguay y a quienes deben reportar. Deben obedecer el mandato, que se supone es velar por los intereses de Uruguay y no por los partidarios y mucho menos por los personales. Una de las razones por las que siempre hubo representantes de la oposición en las Delegaciones
Cada Organismo tiene sus cometidos y sus particularidades, se lo otorgan los Estados en los acuerdos iniciales y en otros posteriores. Por ejemplo, CARU no tenía competencia en el dragado hasta que en 2011, los Presidentes Mujica y Cristina Fernández le encomendaron hacerse cargo del dragado desde el Kilómetro cero hasta el Puerto de Paysandú.
La actividad de CARU
Andrés y Gabriel profundizan sobre la CTM de SG, por lo que me remito algunos aspectos de la experiencia en CARU. Oportunamente trazamos cuatro líneas estratégicas de desarrollo del trabajo, una interna, asociada a la mejora de la organización institucional y tres que complementaban lo que desde el gobierno y especialmente desde los territorios se planteaba: integración, desarrollo y cuidado ambiental. Algunas de las actividades tenían que ver con más de uno, para mayor claridad ejemplifico.
Se dragó hasta Paysandú, pero se complementó y quedó pronto un proyecto con el dinero reservado para mejorar las condiciones de navegación hasta Salto, faltaba la autorización de los Estados para ejecutarlo. También se cumplió con el mandato de los países y se entregó a fines de 2018 un estudio de viabilidad del puente Bella Unión-Monte Casero, que contaba con proyecto ejecutivo y proyecto de pliego de licitación internacional para su construcción.
El dragado y el puente son ejemplos de obras de infraestructura que facilitan y fortalecen la integración, pero también generan condiciones para el desarrollo.
La promoción de la pesca deportiva tiene que ver con el fomento a una actividad directamente vinculada a la dimensión económica del turismo, pero también colabora con los procesos de integración.
Es deber de CARU reglamentarla, a inicativa de la Delegación Uruguaya en CTM y en acuerdo con CTM se ajustó la normativa que regula la pesca en las inmediaciones de la represa, ampliando por razones ambientales y de seguridad la zona de exclusión. Lamentablemente hoy no se cumple y vemos pescadores apoyados en la propia represa con los riesgos que implica.
La promoción del consumo de pescado de río, tiene que ver directamente con promocionar la aparición de pequeños comerciantes, pescadores y del área gastronómica, que requiere el compromiso de los consumidores con un río sano del cual se puedan usar los peces para la alimentación.
En la dimensión ambiental se comenzó y avanzó en el monitoreo de la zona de influencia en el río de la planta de Botnia y de la desembocadura del río Gualeguaychú y en la propia planta y se avanzó hacia el monitoreo de calidad de aguas de todo el río, profundizando en la de zona de influencia de Salto y Concordia, el área urbana más grande de todo el tramo compartido. Lamentablemente la última publicación de datos fue a comienzos de 2020.
El monitoreo ambiental sirve para controlar y tomar decisiones, si no se ven los resultados no sirve para mucho.
En ese sentido, quedó un proyecto ejecutivo y los fondos necesarios para la construcción y puesta en marcha del Laboratorio Ambiental Binacional en la localidad de Fray Bentos, que acordaran oportunamente Macri y Tabaré. El proyecto arquitectónico sale de un concurso binacional de proyectos que ganó un equipo uruguayo entre casi cien propuestas.
De forma incomprensible, fue dejado de lado. No se entendió ni la trascendencia de cuidar la calidad del agua del río ni la importancia estratégica, incluso en términos de soberanía, de contar en Uruguay con un laboratorio que pueda ser referencia internacional.
Realidad actual
Varios de estos temas fueron convenidos formalmente entre CTM y CARU, en otros por poner el interés del país y la región en primer lugar lo acordamos entre las delegaciones uruguayas, por ejemplo el analizar las posibilidades reales de concretar el pasaje de barcos desde el lago hacia al sur. Hoy no vemos ninguna articulación entre ellas, incluso por la información que manejamos existe una mala relación que anuló el diálogo. Es imperdonable.
A partir de los antecedentes, y con la intensión de evitar caer en lo mismo, surgen algunas críticas. En primer lugar, la discontinuidad sin más de algunas acciones que tienen que ver con los procesos que sin ninguna duda le interesan al Uruguay, y que van desde cuestiones grandes como el Laboratorio o la publicación de datos de calidad de agua del río hasta otras que podrían ser clasificadas como menores como la discontinuidad de los aplicaciones vinculadas al turismo y a la promoción de la flora autóctona.
Muchas de estas cuestiones fueron dejadas de lado sin más, nunca sabremos si porque venían de otras administraciones o porque no hubo capacidad de entender la importancia de las mismas en términos de defender los intereses del país.
La inexistencia de transición, ni interés por mantener algún diálogo con la Delegación saliente, ni de integrar a la oposición, el cese de los asesores uruguayos de CARU, más alguna persecución, marca una intencionalidad política.
Desafíos
Son asuntos importantes que no se votan directamente, pero que se definen el próximo 27 de octubre. Se votan por candidatos y candidatas a la Presidencia y Vicepresidencia, a las Cámaras de Senadores y Representantes, pero también se elige rumbo del próximo gobierno, líneas y métodos de trabajo, se definen la integración de equipos humanos, políticos y técnicos que llevarán adelante esas líneas programáticas.
Arq. Rogelio Texeira