Tras un jueves extremadamente inestable en la región, se pudo observar la no tan frecuente postal en el cielo. Se trató de un tipo especial de nube, con formación ondulante.
Se trató de «altocúmulos undulatus», que son un tipo de nube perteneciente a la familia de los altocúmulos, que se caracterizan por su apariencia ondulada o en forma de franjas paralelas.
Estas nubes se forman en niveles medios de la atmósfera, entre los 2,000 y 6,000 metros de altitud y están compuestas principalmente por gotas de agua.
Curiosa formación
La formación de este patrón ondulante se debe a variaciones en el viento, que crean ondas en la atmósfera, donde las nubes se alinean siguiendo esas corrientes.
A menudo, se observan cuando hay estabilidad en capas superiores de la atmósfera, aunque pueden estar asociadas a sistemas de baja presión y preceder el mal tiempo, como frentes o tormentas.
Visualmente, pueden crear cielos espectaculares con franjas ordenadas de nubes que cruzan el horizonte, lo que es un indicativo de turbulencia en las capas atmosféricas medias.Popularmente, sobre todo en zonas rurales, se le suelen llamar «nubes corderito».
Diario Río Uruguay