La investigación sobre un funcionario argentino de Migraciones que instaló cámaras en los baños públicos del puente General San Martín sigue avanzando en ambos lados del río. El caso fue descubierto cuando personal de limpieza del paso de frontera encontró una diminuta cámara oculta en uno de los inodoros. De inmediato, se notificó a las autoridades y Prefectura procedió a la incautación del dispositivo, informó el corresponsal Daniel Rojas.
En Uruguay, la Fiscalía de Fray Bentos se encuentra a cargo de la investigación, que se centra en el delito de registro ilegal. Mientras tanto, en Argentina, las autoridades avanzan en una causa paralela que podría involucrar la tenencia de material fílmico sensible, dado que el funcionario es ciudadano argentino. Además, Migraciones de Argentina ha iniciado un sumario administrativo, y el acusado ha sido destituido de su cargo mientras continúan las investigaciones.
La instalación de las cámaras fue detectada por un funcionario de limpieza, quien notó el dispositivo oculto en uno de los inodoros. Tras el hallazgo, Prefectura actuó rápidamente y comenzó a trabajar con la Fiscalía. «Estamos esperando las pericias del equipo de filmación incautado», señalaron fuentes judiciales, subrayando la complejidad de la investigación, que involucra jurisdicciones y posibles delitos diferentes en ambos países.
Las autoridades investigan si el funcionario actuaba por cuenta propia o si integraba una red dedicada a este tipo de delitos. «Por ahora, no tenemos elementos para confirmar la existencia de una red, pero no descartamos ninguna hipótesis», añadieron los investigadores. La situación sigue siendo monitoreada tanto en Uruguay como en Argentina, mientras se intenta esclarecer el alcance y las motivaciones detrás de este acto que ha generado gran preocupación en ambos lados de la frontera.
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