La actividad tuvo como objetivo verificar la correcta utilización de los dispositivos de seguridad obligatoriamente utilizados por los más pequeños.
Es importante un uso adecuado de este sistema de seguridad infantil, debido a que permite reducir hasta en un 90% las lesiones graves en caso de siniestro.
En nuestro país, los niños hasta 1.50m de altura deben usar obligatoriamente un SRI certificado, adecuado a su tamaño y peso.
La atención en la actividad se realizó de forma gratuita y por orden de llegada. Contó con gran afluencia de público y se verificaron más de 60 vehículos.
La jornada contó con el apoyo de la Unidad Nacional de Seguridad Vial (UNASEV), Intendencia de Montevideo (IMM), Banco de Seguros del Estado (BSE), Fundación Gonzalo Rodríguez y ANCAP.