El pasado viernes, la localidad brasileña de Quaraí, fronteriza con la ciudad de Artigas, fue escenario de una fuga con ribetees cinematográficos.
Ese día, un peligroso delincuente vinculado al grupo narco conocido como “os manos” , fue escoltado hasta una clínica para hacerse un estudio medico agendado por su madre.
Durante el trayecto el convoy fue atacado por delincuentes que lograron llevarse al presidiario y huir. En la acción resultaron heridos de bala dos policías brasileños.
Los fugitivos cruzaron el río Cuareim en una picada y abandonaron su auto en Artigas, lo que ameritó la intervención de las autoridades de nuestro país. El vehículo, “de matrícula brasileña, fue periciado por Policía Técnica en Artigas”, expresó Alesandro Alves, jefe de la policía de ese departamento, en rueda de prensa consignada por el medio local Clicregional. En el auto “se encontró una escopeta calibre 12 y un ama corta”, detalló el funcionario.
Las investigaciones permitieron localizar al fugitivo brasileño en una vivienda de barrio Ayuí de la ciudad de Artigas, donde fue arrestado. El sujeto posee antecedentes por varios delitos, y ahora sumó una nueva condena en nuestro país, ya que la Justicia lo encontró culpable de tráfico internacional de armas y le impuso una pena de tres años.
Asimismo, la dueña de la casa en la que se ocultaba fue condenada por encubrimiento, y deberá cumplir una pena de seis meses en libertad vigilada.
Alves explicó que, en trabajo conjunto cos sus pares brasileños, también se logró la detención en Brasil de otro sujeto involucrado en la evasión.
Montevideo Portal