El gobierno del Frente Amplio en Salto perdió millones de pesos por no presentar proyectos de desarrollo para el departamento. Esto representó que muchos barrios, centro e interior quedaran sin la ejecución de obras y en estado de abandono, como actualmente encontramos al departamento. La gestión de Lima – Noboa no tuvo siquiera peso político con su gobierno nacional, ya que gobernó los 5 años con el Frente Amplio desde la presidencia.
Las grandes obras llevadas adelante pertenecen a proyectos elaborados y comenzados por la administración de Germán Coutinho: Calafí, Ceibal, PIAI barrio Artigas, Laureles, etc. Proyectos que a este gobierno les llevó una eternidad culminar, ya que algunos de ellos sigue en ejecución. Esto es un retraso para el departamento.
Pese a prometer la reparación de las calles en 100 días, la administración frenteamplista empeoró el estado de las calles y caminos rurales. En el Congreso de Intendentes, Salto fue quien menos proyectos de desarrollo presentó para la ejecución de mejoras para el departamento. Esto de alguna manera explica la fuerte caída de la inversión pública y la alta tasa de desempleo, ya que tampoco llegaron nuevas inversiones. Cuestión que no es que las inversiones lleguen solas por obra y gracia de la espontaneidad, sino que hay que ir a buscarlas para que los salteños tengan trabajo.
El próximo gobierno departamental tendrá la difícil tarea de recuperar la actual situación dejada por el Frente Amplio en Salto, no solo por las deudas de Andrés Lima, con una intendencia desfinanciada y endeudada, sino por que Salto cuenta con más asentamientos, más pobreza, más desempleo y menor desarrollo. Tendrá que gobernar con los recursos comprometidos por esta administración actual.