La que se puso en marcha esta mañana en el Senado no fue una sesión más, pues dos referentes de la política nacional como José Mujica y Julio María Sanguinetti renunciaron a sus bancas, que pasarán a ser ocupadas por Alejandro Sánchez y Tabaré Viera, respectivamente.
Muchos de los legisladores presentes destacaron la trascendencia de este día al destacar no solo los cualidades de los expresidentes, sino también valorando el “orgullo republicano uruguayo”, como lo definió Carlos Camy, que permite ver a dos personajes tan relevantes y disímiles retirándose del parlamento el mismo día. “¿Qué otro país puede exhibir esto? ¿Es tan fácil de encontrar? Es una marca país, es un sello nuestro”, sostuvo.
Senadores de todos los partidos les dedicaron palabras a Mujica y Sanguinetti. “Quiero vivir en este Uruguay de respeto y orgullo democrático. Sanguinetti no se va. Siempre estuvo y siempre estará”, dijo Germán Coutinho. Por su parte, Tabaré Viera escribió en Twitter: “Se retira el presidente Julio María Sanguinetti del Senado. Seguirá trabajando por el Partido y por el País desde la Secretaría General partidaria y desde sus libros y artículos. Para mi, que tengo el altísimo honor de sucederle en el cargo, es un inmenso compromiso que redobla mi vocación de servicio”.
Sobre Mujica, cuya intervención podes leer cliqueando acá, el cabildante Guillermo Domenech lo consideró un representante “de lo nacional y lo popular, en su forma de vida y en su verbo”. “Este recinto perderá a un luchador de todas las horas”, dijo Mario Bergara de quien “es el político uruguayo más reconocido y querido en el exterior, y eso se debe a sus ideas de justicia social”.
Los expresidentes tuvieron una cómplice y afectuosa relación durante el tramo de la sesión de la que participaron, como muestra la imagen que ilustra estas líneas.
La República