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Por Nicolás Rodríguez. Desde nuestro punto de vista el árbitro Robert Aguirre cometió un tremendo error que perjudicó a Salto Nuevo. Ayer mismo estando en el Estadio nos dejó la sensación que de ninguna manera era penal, pero la duda quedó abierta al no tener la repetición en el momento.

Felizmente el campeonato salteño cuenta con televisación que nos permite luego ver el partido o las jugadas polémicas. Esta mañana más tranquilos, nuestros compañeros nos hicieron llegar la grabación y con la imagen de la tele no hay dudas, no fue penal. La pelota pega en la cabeza del jugador de Salto Nuevo y el rebote en ningún momento pega en la mano o brazo, sino que va a la pierna del defensa.

Error grave porque ese penal le dio la victoria al equipo de Gladiador en un partido muy parejo que quizás lo más justo era el empate. No tengo dudas que para ese partido era necesario un árbitro de experiencia, un Ruben Ferreira, por ejemplo.

También dejamos claro en la presente nota que nuestra apreciación es netamente sobre la jugada, un error como tantos que se pueden cometer. No vamos a caer en la calentura del hincha de un cuadro y poner en duda la honestidad del árbitro, de la persona. Eso no. Un error, como nos equivocamos todos. Como se equivoca un defensa, un delantero, un arquero, un periodista, como lo hacemos todos. Desde ya condenamos cualquier comentario que no se refiera netamente a un error. También es cierto, un error que perjudicó a un equipo y por eso la nota de la labor de la terna no fue buena.


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