El caso tuvo lugar en Túnez y sorprendió al equipo médico, que extrajo intacto el objeto.
Una mujer tunecina de 45 años protagonizó un extraño episodio médico.
Según consigna el periódico Daily Mail, la paciente reportó un persistente problema de incontinencia urinaria y sangrado en la micción, situación con la que había convivido durante años.
Cuando los médicos del Hospital Académico Habib Bourguiba, en la ciudad de Sfax, la sometieron a una serie de pruebas de rutina, se llevaron una gran sorpresa.
Tal como se aprecia en las imágenes, la paciente albergaba en la vejiga un gran cuerpo extraño. Se trataba de un vaso de vidrio de unos ocho centímetros, del tipo conocido como “americano”, uno de los diseños más comunes en estos recipientes.
Si el extraño descubrimiento no fuera suficiente para los galenos, el asombro creció cuando se enteraron de que la paciente sabía perfectamente que el objeto estaba allí, y que lo había llevado en su interior durante mucho tiempo.
La mujer dijo tener un fetiche con una práctica conocida como “sondeo uretral”, donde se utiliza la uretra, conducto por donde sale la orina, como orificio de penetración.
Allí, ocho años antes, se había insertado el vaso como juguete sexual. El objeto no volvió a salir y la mujer comenzó a experimentar una más que comprensible pesadez en esa zona del cuerpo, así como frecuentes dolores en el abdomen.
Por fortuna, el vaso estaba intacto y los médicos lograron extraerlo en ese mismo estado. También constataron que dentro de la vejiga había una lesión por inserción, sobre la que trabajaron. Dos días después de la extirpación la mujer fue dada de alta.
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