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Por Carlos Beasley.

Frente Amplio.

Desde diferentes lugares y espacios se están tomando distintas medidas para mitigar efectos de la contaminación. Y aquí, en Salto, a nadie es ajena la lucha de las petroleras por parte de un grupo de vecinos, el cuidado del agua por parte de otros, la preocupación por el reciclado desde empresas privadas y desde lo domiciliario.

Y mientras estamos a la espera de una ley que englobe el problema medioambiental en forma integral, vamos avanzando cada uno en la medida de lo que su conciencia le dicte.

Hace pocos días entró en vigencia un acuerdo, que en realidad no sabemos bien si es acuerdo o desacuerdo, en el que interviene el pueblo de Salto y el Centro Comercial, para disminuir la circulación de bolsas plásticas entregadas por el comercio a los viandantes de Salto. Y ahí ha habido diferentes reacciones en estos días en que se ha puesto la medida o que se ha empezado a poner en práctica la medida, que tenía como fecha de inicio este 1º de abril.

Algunos han acatado la medida, y en el momento de uno pasar por las cajas, quien está despachando pregunta si va a llevar bolsa o no, y procede a cobrar los famosos dos pesos convenidos para la bolsa estándar y tres para las bolsas grandes. Pero no son los más los comercios que se adhirieron a esta medida y en la forma pactada. Hay algunos que han decidido ex profeso ignorar esta medida amparados incluso con la consulta de que no existe ninguna ley que los obligue a hacerlo y que pueden entregar perfectamente las bolsas con publicidad en la cantidad que consideren necesarias o incluso hasta innecesarias, a los clientes que concurren a sus comercios.

Y hay una tercera porción de comerciantes que han optado por lucrar con el tema, y lejos de acatar la medida, han bajado la calidad de las bolsas con el pretexto explícito –porque así nos lo han hecho saber- de que al contener menos cantidad de material se va a degradar más rápido, cosa que no es cierto porque tenemos que poner más bolsas para sustentar lo que compramos. Y además de eso, las están cobrando más caro que lo que habían pactado con el propio Centro Comercial, del cual son socios.

Cada uno desde algún lugar hace algo para luchar contra los efectos de la contaminación. Cada uno desde alguna punta intenta ayudar en la solución de este problema, pero hasta ahora no pensamos en forma integral en el problema, y a la muestra está, las reacciones que unos y otros tienen a algo que fue pactado por todos o por lo menos por quienes votaron como sus representantes en el Centro Comercial.

Repito: el problema está. El problema ya nos está agobiando. Algunas tímidas medidas como estas se ponen en práctica con el malestar de unos y otros, con el respeto de unos y otros, y con el aprovechamiento de la situación de unos y otros. No pensamos en forma integral. ¿Lo haremos algún día? Es una gran interrogante que la tenemos presente y en la que tenemos que trabajar.

Quisiera, que desde este espacio de la Media Hora Previa, colaborar con esto intentando hacer público el apoyo a esta medida, solicitando a usted que comunique estas palabras al señor Intendente de Salto, al Centro Comercial e Industrial de Salto, a la prensa en general, y sea colgada esta exposición en la página web de la Junta Departamental.
Muchas gracias, señor Presidente.

Exposición Junta Departamental de Salto.


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