El director de Policía Nacional Mario Layera anunció este lunes que analizan la forma de implementar esta medida como respuesta a lo que observan que está sucediendo con empresas que contratan policías porque van armados, como un servicio de seguridad encubierto.
Layera aseguró que esta medida es para proteger a los policías que cuando trabajan fuera del Ministerio del Interior están solos, sin chalecos antibalas y mucho más expuestos.
En lo que va de 2019 asesinaron a cuatro policías en intentos de rapiña. En algunos casos la víctima del asalto fue directamente el policía, pero en otros, como el caso de Rogelio Souza la semana pasada, trabajaba en un reparto de bebidas que fue rapiñado.
El Ministerio del Interior cree que las empresas contratan policías para tareas comunes, aprovechándose de que en todo momento pueden portar su arma de reglamento, y que actuarán como tales ante un intento de rapiña.
Esto fue lo que le ocurrió a Souza. Tres delincuentes interceptaron el camión de bebidas en el que trabajaba y ante su reacción como policía lo ejecutaron de seis disparos.
La idea del Ministerio, dijo Layera, es que el policía pueda portar su arma todo el día salvo cuando esté cumpliendo tareas para privados o particulares.
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