De los 16 que obtuvo en las elecciones departamentales de 2015, la bancada de ediles del Frente Amplio (FA) en Salto quedó restringida a ocho curules. Dos de los tres ediles, que fueron denunciados por el intendente Andrés Lima por una eventual adulteración de boletas, y la madre de uno de ellos, también edila, se declararon independientes. Pero ahora, cinco ediles más (entre los que está el restante de los tres denunciados) ya no coordinan más con la bancada.
El sábado, el Plenario Departamental del FA resolvió “elevar” al Tribunal de Conducta Política (TCP) de la coalición “la actitud” adoptada por los curules Liliana Filonenko (ex Partido Comunista del Uruguay, PCU), Jorge Pintos, Gervasio Carbajal, Eduardo Godoy (los tres electos por la lista de Lima, la 888), y Lucía Martínez (Asamblea Uruguay), por desconocer “la postura asumida” por el “máximo órgano de decisión política departamental” y por “la bancada de ediles” de la fuerza política “en un claro y categórico rechazo al artículo 4 de la Modificación del Presupuesto de la Junta Departamental propuesto por el Partido Colorado [PC], que supone la aprobación de un ‘sueldo encubierto’ para los ediles, notoriamente inconstitucional e ilegal”. La resolución firmada por la presidenta del FA de Salto, Mónica Cabrera, solicita además “la adopción de las medidas más drásticas previstas en el Estatuto” contra los ediles. “En tanto el Tribunal de Conducta Política no se expida”, la resolución solicita también “públicamente que estos ediles dejen sus bancas obtenidas gracias al esfuerzo de todos los frenteamplistas salteños”. El FA considera “que los ediles departamentales deben recibir una remuneración por la tarea que realizan, para lo que la fuerza política está dispuesta a promover una reforma al artículo 295 de la Constitución de la República para que futuras administraciones reciban este beneficio”, concluye la resolución, recogida por el diario El Pueblo.
Si bien esta resolución es de la semana pasada, la polémica votación en la Junta Departamental fue a fines de abril. El PCU fue uno de los primeros en pronunciarse sobre el hecho, enfocándose en particular en la edila Filonenko. “Hoy, el golpe lo dan cuatro tristes personajes, quienes de la manera más rastrera juntan su voto con el PC, responsable de fundir las arcas de la Intendencia y se asignan un sueldo, desconociendo toda normativa. Particularmente condenamos la actitud de la edil Liliana Filonenko, quien llegó a la banca a través de nuestro Partido y a quien en su momento le encomendamos con toda confianza la noble tarea de ser nuestra vocera en el órgano legislativo. La respuesta que tuvimos fue la traición. Primero se desvinculó de nuestro partido quedándose con la banca y desconociendo que fue nuestra organización la que le permitió acceder a tan destacada responsabilidad. Ahora, sumada a la traición al partido, traiciona al FA prestándose a la violación de nuestra Constitución junto con el PC”, decía un comunicado del PCU posterior a la votación.
Fuentes del FA de Salto confiaron a la diaria que la situación de la bancada “es muy compleja”, ya que el oficialismo ahora sólo tiene ocho ediles, y por lo tanto perdió la mayoría en la Junta. Sin embargo, estos cinco ediles han planteado en varios medios locales que quieren seguir “defendiendo la gestión” del intendente Lima.
La Diaria