Los servicios básicos que presta toda la Intendencia de Salto pasan por su peor momento. Calles intransitables, basurales por todos lados, alumbrado público con serios problemas y el pésimo servicio de ómnibus, compromete seriamente la gestión del Intendente Andrés Lima.
A cuatro años de haber asumido el gobierno, la administración frenteamplista toca fondo por no solucionar los grandes temas del departamento y tener un mayor endeudamiento, del que tanto criticaron. La actual administración debe muchísimo dinero a proveedores que llevan en algún caso, muchísimos meses sin cobrar.
Salto se ubica en el podio del desempleo, faltan inversiones y no hay desarrollo. Para colmo, la inseguridad ganó la calle y la sensación de los salteños es que no estamos bien.
Estas son las cifras discriminadas del monto acumulado de un año que recibió Salto.
El monto acumulado es casi de mil millones de pesos, concretamente hablamos de $969.802.158.
Por concepto del Art. 214, Salto recibió $ 681.973.230
Alumbrado Público: $ 31.305.024.
Unificación de Patentes: $ 7.818.578
FDI: $109.884.736
FIGM: $34.004.138
Caminería Rural: $ 6.993.373
Caminería Departamental: $ 15.741.770
Ley de Remates y Semovientes: $ 48.670.545
PDGS: $33.410.764
En muchos de los casos, la intendencia está sujeta a la certificación de obras para luego recibir el dinero. En el caso de Salto, es uno de los departamentos con mayor dificultad para la ejecución de obras. Esto implica que nuestro departamento pierde millones de pesos por no ejecutar obras.
A pesar de ello, Salto recibió el año pasado, casi mil millones de pesos. Sin embargo, la mayoría de los salteños vemos a Salto con serias dificultades. En que se gasta el dinero de los contribuyentes si los servicios están muy mal y no hay grandes obras?
El gobierno de Andrés Lima recibe un mayor monto de dinero pero Salto está cada vez peor. Este dinero no cuenta la partida de los 2600 millones que el gobierno nacional destina ahora por la creciente para las Intendencias, donde Salto recibirá mas recursos financieros.
La pregunta que se plantea la presente crónica, de dónde está el dinero, hace referencia a que evidentemente no la totalidad de este dinero está en reparar calles , limpiar la ciudad tampoco, y menos en mejorar el transporte urbano.