La divulgación del triste caso del doble homicidio de Giuliana y Mateo en el mundo digital, sobre todo las redes sociales, dejó mucho que desear. “Cazanoticias” (por llamarles de alguna manera) que encendiendo una cámara de algún celular han recorrido hasta el lugar donde se hallaron los restos para ver qué más encontraban, mostrando lo que ellos consideran sea relevante y embarrando la cancha del trabajo de la Policía –al tratarlos de desinteresados o cómplices– que, como dijo el jefe Eduar Alvez de Almeida, también sienten dolor y tristeza por lo ocurrido. Sin embargo, en la ley de la selva de los “likes” todo parece valer. Al igual que la difamación, para generar más odio. Tal fue el caso de la edila Mabel De Agostini, quien debió soportar no solo la consternación por el hecho sino también que se la señale como la arengadora de incitar a cantar a los niños en la marcha, de la cual De Agostini no participó ni en la última fila. Así lo hizo saber incluso el Frente Amplio, al emitir una declaración de su bancada. “Frente a la situación trágica que atraviesa el departamento, donde muchos portales de noticias se han hecho eco de los cánticos que ocurrieron en la marcha de pedido de justicia por Giuliana y Mateo, la edila Mabel De Agostini fue citada como responsable de incitar a los niños a realizar los mismos, siendo que la compañera a raíz del dolor que le ocasionó la muerte de una vecina y un niño del Club de sus amores, al cual desde hace 60 años está vinculada, no participó de la marcha. Queda claro que quienes la involucran no la conocen personalmente, ni se tomaron el trabajo de buscar una imagen de ella, para verificar su identidad. Como bancada de ediles y edilas del Frente Amplio respaldamos y brindamos todo nuestro apoyo a la compañera y exigimos a quienes la han acusado falsamente se retracten públicamente”, publicaron.
PERIODISTA POR HOMICIDA
Otro caso fue el del portal de información Infobae de Argentina –uno de los de mayor alcance en el vecino país y América Latina– donde publicaron la noticia del hecho, ayer en la mañana, pero con una gruesa equivocación. Al referirse al homicida se equivocaron (y feo…) Lo identificaron como Pablo Blanc, cuando bien sabemos los sanduceros que ese no es el nombre del asesino (Jorge Daniel Lara Ríos) y sin embargo es el de un compañero de nuestra Redacción y a su vez corresponsal de Subrayado. No solo lo hicieron una vez, sino que tras aseverar que “Pablo Blanc fue imputado por el asesinato de su hermana Giuliana Lara y de su sobrino Mateo Miños”, le siguió otro párrafo en que informaban que “se dispuso la prisión preventiva por 180 días de Blanc”.
Diario El Telégrafo